Las personas con problemas de salud mental constituyen un sector de la población especialmente vulnerable. Una adecuada atención debe estar orientada a la rehabilitación, la reinserción social y la integración laboral. Así lo indica la M.P. Rocío Ramírez Flores, jefa del Departamento de Rehabilitación del Instituto Nacional de Salud Mental “Honorio Delgado – Hideyo Noguchi”(INSM “HD-HN”).

La especialista señala que en nuestro país el tema del estigma hacia la enfermedad mental en la actualidad continúa muy arraigado. Una persona con problemas de salud mental tiene muchas dificultades de integración social en la comunidad, como el acceso al trabajo, vivienda o servicios públicos.

Indicó que es necesario promover la mejora de las condiciones de vida de estas personas. “Como sociedad muchas veces no visualizamos tanto las enfermedades mentales; por lo que  Fomentar su autonomía, prevenir el deterioro y hacer real y efectivo su derecho a la no discriminación y a la integración social es un trabajo que debemos realizar en esta sociedad.  Los centros de  trabajo son puntos  claves para impulsar una cultura positiva y de bienestar en las personas con una discapacidad, fomentando el que sean personas proactivas y puedan  trabajar como es su derecho y se pueda lograr su recuperación”, acotó la M.P. Ramírez.

Actualmente, la baja inserción laboral de las personas con problemas de salud mental es una de las principales barreras para su integración social y rehabilitación. Esto se da principalmente por el desconocimiento y el estigma que se tiene hacia ellos. Un problema de salud mental no tiene por qué ser impedimento para obtener un empleo, y es importante contar con las condiciones de trabajo adecuadas para  toda persona así también para la persona con discapacidad.

LA FAMILIA COMO APOYO EN LA RECUPERACIÓN DEL PACIENTE

La especialista explica que muchas veces la familia es la principal fuente de estigmatización hacia los pacientes. Generalmente la familia los limita o por el contrario se generan expectativas tan altas difíciles de ser alcanzadas por el grado de discapacidad que padecen.  “La familia, es el primer ambiente donde el paciente se va a reinsertar socialmente.  Constituyen el nexo hacia la reinserción social y laboral”, precisó la especialista

DEPARTAMENTO DE REHABILITACIÓN DEL INSM “HD-HN”

La M.P Ramírez señala que el Departamento de Rehabilitación del INSM “HD-HN”  atiende a  pacientes con discapacidad , en su mayoría con trastornos mentales graves como la esquizofrenia paranoide. Este trabajo se realiza a través de un equipo multidisciplinario (médicos, psicólogos, enfermeras, técnicos de enfermería, tecnólogos médicos en terapia física y ocupacional, educadora y trabajadora social) donde se brindan diversas terapias al paciente en su proceso de recuperación y rehabilitación para volver a reinsertarlo a la sociedad, como es su derecho.

Este proceso de rehabilitación está comprendido en cuatro fases. La fase uno se encarga de mejorar la capacidad funcional del propio individuo, aprender a conocer sobre la enfermedad y cómo la participación de la familia contribuye en la rehabilitación. La fase dos trabaja en cómo el paciente puede mejorar sus habilidades sociales y las actividades diarias, entre otros, que le preparan para integrarse en su comunidad. La fase tres corresponde a la parte pre laboral y la fase cuatro tiene como objetivo la inserción/reinserción laboral a través del seguimiento socio productivo.

El objetivo principal de la Rehabilitación Psicosocial y Laboral es la inserción de nuestros usuarios en los diferentes ámbitos (social y laboral) a la sociedad, respetando su individualidad; convirtiéndose la familia en un factor importante en el logro del bienestar de nuestros usuarios, por lo que participan de manera activa en el proceso de Rehabilitación.

(Instituto Nacional de Salud Mental «Honorio Delgado – Hideyo Noguchi»)