La jueza Mercedes Caballero García acogió el pedido del fiscal supranacional anticorrupción, Walter Delgado, y decretó 14 meses de prisión preventiva para Gregorio Santos Guerrero, acusado de delitos de corrupción por favorecer al empresario Wilson Vallejos Díaz, con licitaciones de obras públicas para la región Cajamarca.

La jueza Mercedes Caballero sostuvo que hay graves y fundados elementos de convicción sobre los cargos que se le imputa a Santos Guerrero y argumentó en su decisión que son evidente los vínculos que hay entre Santos y el empresario Vallejos.

Según el Ministerio Público la autoridad regional habría otorgado de forma irregular once licitaciones, con un valor de S/. 155 millones, cometiendo así los delitos de asociación ilícita para delinquir, cohecho y colusión.

El Fiscal Walter Delgado sostuvo que existen 71 llamadas entre el teléfono de Gregorio Santos y el de Vallejos en el 2011 y el 2012, además que el empresario habría comprado una camioneta para Santos valorizada en US$ 42,990 pero fue puesta a nombre del chofer de la autoridad regional.

La decisión de la prisión preventiva se sustenta en el testimonio de colaboradores, así como registros de llamadas telefónicas y depósitos bancarios.

Gregorio Santos en el desarrollo de la audiencia, pidió que la investigación se realice en libertad, aunque dicha solicitud fue declarada infundada.

“Nos vamos a someter a la investigación con toda las reglas, no me voy a escapar”, indicó Santos Guerrero.

Al chofer se le dictó comparecencia restringida.

PRESENTARON AUDIO

El fiscal Walter Delgado presentó un audio ante la juez Mercedes Caballero, que complicaron la responsabilidad de Gregorio Santos en el caso investigado.

Por 7 minutos, se escucha una conversación entre tres personas, que un colaborador con clave identifica como Gregorio Santos Guerrero, Gilmer Idrogo Cruzado y Percy Flores del Castillo.

El colaborador también precisa que cuando en la conversación se mencionó a «Coronado», se está haciendo alusión a Juan Ricardo Coronado Fustamente y en cuanto al supervisor «Roberto», señala que se trata de Roberto Antonio Celis Alva.

El colaborador explicó que esta conversación se produjo después que se difundieron los primeros audios que revelaban actos de corrupción en la región Cajamarca y se produjo descoordinaciones para la continuidad de los pagos de las prevendas que realizaba Wilson Vallejos por los contratos de obras públicas.

En el audio se escucha el siguiente dialogo.

Gregorio Santos: ¿Pasa, qué tal?

Gilmer Idrogo: Ahí, estamos avanzando.

Santos: ¿Cómo vas en Cajabamba?, ¿tú estás en Cajabamba? ¿Cómo vas?

Idrogo: Sí, bueno hemos iniciado hace 3 o 4 semanas, más o menos.

Santos: Ya.

Idrogo: Ya recién nos hicieron el 18 la entrega de terreno, hasta la fecha estamos….

Santos: ¿Qué tiempo tienen previsto?

Idrogo: 5 meses.

Santos: 5 meses, abril, mayo, junio, julio, agosto.

Idrogo: Por lo menos debemos terminar.

Santos: Bien, tú conoces a Percy, el hombre va a estar coordinando algunas cosas contigo, ya.

Percy Flores: Para lo que siempre hemos conversado, para que no haya malos entendidos, ni Coronado, uno solo nada más.

Idrogo: Lo que sí señor Presidente la vez pasada me llamó cuando Juan creo que se había reunido con usted.

Santos: Sí pues, pero el hombre es demasiado, comenzó a coger, a veces se desespera, por eso hemos cortado todo caso con él.

Idrogo: Ya.

Santos: Por eso te hemos llamado, para que sepas y contarte algunas cosas.

Idrogo: Porque a Coronado también se le ha dado una parte.

Santos: Que Siiii (ilegible).

Flores: YA, YA, YA ¿algún problema con la obra?

Idrogo: Bueno ahorita, está recién que estamos empezando, ta todo tranquilo.

Flores: ¿Quién te está supervisando?

Idrogo: Por el momento está Roberto, está como inspector.

Flores: A ya.

Idrogo: La supervisión, todavía no se sabe cuándo firmara contrato, porque recién se ha adjudicado también, estamos con inspector ahorita avanzando provisional.

Flores: Estamos avanzando en ese documento de…

Santos: ya pe hermanito…. Ilegible…

Flores: Ahorita lo coordino, ya ya está, las cosas tranquilas sin malos entendidos.