El día que recibió su credencial como alcalde electo de Asunción se refirió a su antecesor.
Cajamarca. – El 20 de noviembre en el frontis del Ministerio Público, el electo alcalde del distrito de Asunción, Manuel Vigo Muñoz, salía sonriente con el documento que lo acreditaba como autoridad edil para un nuevo periodo.
Los periodistas que lo abordaron le volvieron a preguntar sobre sus actuales relaciones con su eterno rival político, el saliente alcalde de Asunción, Juan Torrel Rabanal.
Manuel Vigo respondió con algunas expresiones que – según afirma- ya lo había manifestado abiertamente en la última campaña electoral.
“Yo creo que nada sacamos gastando recursos en denuncias por venganzas políticas, es una promesa”, respondió dando a entender que el próximo periodo de gobierno no iba a destacar una nueva temporada de enfrentamientos judiciales.
“Lo único que le podría decir es que empiece a trabajar en entregarnos las cuentas claras”, añadió Manuel Vigo para zanjar el tema.
Como se sabe, Manuel Vigo alternó periodos de gobierno de ese distrito con su mayor rival político del Partido Aprista Peruano, Juan Torrel Rabanal. A lo largo de sus mandatos se lanzaron acusaciones y denuncias mutuas de malos manejos y presuntos actos de corrupción que los llevo a una prolongada batalla judicial en los tribunales del Poder Judicial de Cajamarca.
Tras conocerse el asesinato a balazos del electo alcalde del distrito de Asunción y a su esposa, cuando se alistaba para asumir un nuevo periodo en la alcaldía de su distrito 2019-2022 e iniciarse el proceso de transferencia administrativa, las primeras sospechas sobre la autoría intelectual del crimen han estado dirigidas contra el saliente alcalde bajo el argumento de un probable temor a profunda investigación del nuevo ejercicio de su gobierno.